Más sabe el diablo por viejo que por diablo, Concepto de Sabiduría
«Donde no hay viejo, no hay buen consejo.»
En diversas culturas antiguas llegar a una edad avanzada significaba alcanzar un lugar privilegiado en la comunidad, ya que la entrada a la vejez era considerada una toda hazaña.
Ya que les significaba que las personas mayores habían hecho lo necesario para poder alcanzar la ancianidad y poseían el secreto para lograrlo.
El anciano ahora pasaba a ser parte de un grupo especial, quienes dominaban el conocimiento de la vida y la muerte, los sabios.
Pero ¿La sabiduría llega con la edad o hay más elementos que permitan considerar a alguien como un sabio?
Diferentes autores han buscado definir qué es la sabiduría, y a continuación mencionaré algunas de las conclusiones a las que se han llegado.
«Guardia viejo no cae en gancho.»
Para McKee y Barber (1999) “La sabiduría es una extensión del pensamiento posformal, una síntesis de razón y emoción”.
Estas personas son capaces de mediar entre el deseo y el deber, pudiendo mezclar ambas alternativas de tal manera que el resultado sea beneficioso para la persona.
«En casa de viejo: no faltará un buen consejo.»
Para Robert Sternberg, la sabiduría es una “forma especial de inteligencia práctica con un aspecto moral”.
En la cual, escucha los deseos o necesidades, tanto propios como de otras personas y los somete a un juicio de valor.
Buscando una forma de actuar que sea libre y la solución sea satisfactoria, sin perder de vista las capacidades de la persona, sus límites y cuidando de no traicionar sus principios y valores.
Que es lo que vuelve diferente la manera en que toma las decisiones, ya que es capaz de ver a la persona y la meta al mismo tiempo, sin perder de vista a una u otra.
«Buey viejo mal tira, pero bien guía.»
Baltes y su equipo definieron la sabiduría como “El aprendizaje y la práctica en las habilidades y la motivación requeridas para esforzarse por la excelencia”.
Por lo que la sabiduría envuelve tanto experiencia como el deseo de hacer las cosas de manera correcta.
Para Baltes, la apertura a la experiencia, la creatividad, el pensamiento reflexivo y el razonamiento moral contribuyen a la sabiduría, o sea que un sabio es quien sabe cómo hacer las cosas y se atreve a hacerlas.
Si vemos a la sabiduría como un proceso que requiere cierto tiempo, experiencia y templanza, quien se nos viene a la cabeza con dicha imagen son las personas mayores, que no permiten que el tiempo siga presionándoles.
Así que, si usted desea ser considerado como sabio, ya sabe qué características es necesario desarrollar para lograrlo.