Amistades Tóxicas ¿Con qué tipo de personas me puedo encontrar?
Amistad. ¿Cuándo piensas en esta palabra qué te viene a la cabeza? Seguro que alguna otra como: confianza, lealtad, sinceridad, cariño, apoyo… Pero tú y yo sabemos que no siempre es así. En nuestra vida nos hemos cruzado y nos cruzaremos con gran cantidad de personas. Cada una con una personalidad diferente y en su mente maquinando hacia unos objetivos distintos. Es por ello que no sabemos cómo va a ser cada persona, hasta que la conoces bien.
En ocasiones es difícil prevenir de qué palo va la gente, no porque seamos ignorantes, sino porque confiamos demasiado en el quehacer de las personas. Algunos queremos lo mejor para los demás, tanto que, en ocasiones descuidamos nuestras espaldas. Pensamos que si nos portamos bien con alguien esa persona se portará bien con nosotros… ERROR.
Por muy gentiles, humanos, honestos, leales, sinceros, amables, etc. que pretendamos ser con los que nos rodean, hay personas que, no es que quieran especialmente nuestro mal, pero como sólo piensan en su bien, entonces, indirectamente nos hacen daño.
No tenemos que ser malos, ni bordes, ni ir con un escudo cada vez que salimos a la calle…. sino simplemente tener CUIDADO. El lobo puede ir por la calle vestido de cordero (tal y como hablé en el artículo de PERSONAS TÓXICAS), y ese cordero raquítico por mucha lástima que nos dé, puede ser en realidad un lobo muy feroz.
Tal y como he mencionado al principio, durante toda nuestra vida estamos expuestos a gran cantidad de personas, pero durante la adolescencia, tenemos nuestro “radar de personas tóxicas” mucho más bajo y nos exponemos más. Esto es debido a que estamos en pleno descubrimiento de nuestra identidad, nos queremos sentir integrados con la gente que nos rodea, experimentamos nuevas sensaciones, no sabemos realmente lo que está bien y lo que está mal, y terminamos por confiar en gente que no deberíamos.
¿Con qué tipo de amistades tóxicas me puedo encontrar?
- El kinder sorpresa: es el típico amigo que cuando menos te lo esperas en un abrazo te puede meter un puñal, no te lo esperabas justo de él pero… «¡menuda sorpresa! con lo calladito que era…» pero es el típico que de la noche a la mañana puede contar a voces tus secretos más preciados, con tal de hacerse de «notar» con otras personas.
- El drogata: es el típico que tiene por amigas a las drogas y que no puede vivir sin ellas. Te quiere meter en su mundillo y cada dos por tres intenta que seas de su clan.
- El manipulador: es esa persona que se las ingenia para darle la vuelta a la tortilla e intentar que los demás hagan lo que él quiera. Te sabe vender “el oro y el moro” y sabe el punto débil de cada persona.
- El saqueador: es esa persona que quiere estar a tu lado para beneficiarse de ciertas cosas que él o ella no tiene la capacidad de poseer: ideas, dinero, favores, etc. Es decir, suele buscarte sólo cuando algo de ti le interesa.
- El doble: es ese amigo o amiga, muy parecido al saqueador, que poco a poco se infiltra en tu vida agradándote pero termina por querer quitarte ya no sólo tus ideas, sino tu forma de ser, tus amigos, tu pareja, tu familia, etc. es esa persona que poco a poco se infiltra en tu vida y pretende, en pocas palabras, ser como TÚ.
- El pupas: son esos amigos que, no es que siempre vean la parte mala, es que nunca ven la parte buena. Todo le parece mal, todo le incomoda, todo es injusto, todo le hace daño, todo es un mundo cruel y despreciable, y si haces lo mismo que resto, también eres horrible. “Así que… cuidadito con lo que haces”
No puedo terminar este post sin hacer especial hincapié en que las amistades se cuentan con la mitad de los dedos de una mano. En la mayoría de ocasiones son más bien compañeros, conocidos, personas de “vista”, amigos de amigos… RECUÉRDALO.
