Terapia Regresiva: ¿en qué consiste y cómo funciona?
La terapia regresiva es un método alternativo para tratar problemas emocionales cuyas causas son inexplicables o resulta muy difícil identificarlas.
Este enfoque pretende encontrar la raíz de los traumas y dar una solución a los conflictos que tenemos en el presente buscando su origen en el pasado.
La terapia regresiva, como su nombre lo dice, se enfoca en la recuperación de vivencias o eventos que experimentamos anteriormente pero que hemos olvidado.
En este apartado profundizamos sobre las implicaciones de la terapia regresiva, sus orígenes y el funcionamiento de este milenario y controversial método.
¿Qué es la terapia regresiva?
La terapia regresiva es un modelo terapéutico alternativo, que busca solucionar los conflictos emocionales a través del análisis de experiencias pasadas e inconscientes.
También llamada “Terapia de regresión”, se basa un principio denominado: atemporalidad de la consciencia, el cual sostiene que para la conciencia el tiempo no existe.
Por lo tanto, este tipo de terapia supone que todas nuestras experiencias (incluyendo “vidas pasadas”), ocurren en un mismo momento para nuestra conciencia.
Es decir, que para nuestra mente inconsciente no existe distinción entre lo que nos sucedió hace cinco minutos y nuestras experiencias de hace 10, 15 o incluso mil años.
También postula que todas las experiencias se guardan en el inconsciente, se mantienen ahí indefinidamente y determinan la conducta en el presente.
Por esta razón, algunos terapeutas (partidarios de este tipo de terapia), infieren que algunas personas no sean capaces de explicarse su propio comportamiento.
Por ejemplo, alguien que padecen algún tipo de fobia, y que, echando un vistazo a su historia de vida, no le ha ocurrido nada que pudiera desencadenarla.
Otro fenómeno similar, se da cuando una persona sin ningún tipo de problema relevante, experimenta una angustia o malestar aparentemente inexplicable.
En estos casos, la terapia regresiva analiza e intenta hallar al origen del problema, echando mano de su recurso más representativo: la hipnosis de regresión.
Aduciendo que, una vez develada la raíz del problema, la persona podrá comprenderlo mejor y será capaz de “unir las piezas” para poder solucionarlo.
Orígenes de la terapia regresiva
La terapia regresiva es una disciplina alternativa, es decir, no pertenece al ámbito de la psicología académica, ya que no cuenta con respaldo científico consensuado.
Sin embargo, es un hecho que su práctica como método terapéutico data de épocas milenarias, y que se ha mantenido en constante actividad hasta nuestros días.
Sigmund Freud es el referente más reconocido en el campo de la hipnosis regresiva, pero la práctica de los tratamientos regresivos se remite a épocas más antiguas.
Sus primeras referencias las podemos encontrar en los templos del sueño de los griegos, en los rituales místicos del antiguo Egipto y en algunas escrituras budistas.
A pesar de ello, Freud con su teoría del psicoanálisis, se convirtió en el primer médico en afirmar que “comenzamos a sanar haciendo consciente lo inconsciente”.
Fenómeno que denominó determinismo psíquico, y que explica la relación entre los eventos de un trauma ocurrido en la infancia y sus efectos en el presente.
Eventos que Freud hacía recordar a sus pacientes por medio de la hipnosis, sin embargo, esta teoría fue aceptada hasta finales de los años 60 y principios de los 70.
Siguiendo sus pasos, muchos hipnoterapeutas empezaron a utilizar tratamientos de retroceso cronológico, para recuperar recuerdos de la primera infancia.
Polémica de la terapia regresiva
Al tomar auge la terapia regresiva, algunos terapeutas comenzaron a referir que, durante el desarrollo de la hipnosis, sus pacientes recordaban sucesos insólitos.
Afirmando que los pacientes, no sólo podían evocar su primera infancia, sino que incluso, podían recordar eventos prenatales y recuerdos de vidas pasadas.
De esta manera, algunos hipnoterapeutas infirieron que existía un elemento capaz de registrar y rememorar sucesos, incluso en ausencia de un cuerpo físico.
Denys Kelsey, un reputado psiquiatra británico de los años 60’s, apoyó la tesis de que el origen de algunos problemas psiquiátricos podía atribuirse a vidas pasadas.
En la siguiente década, se dieron grandes cambios en el paradigma de los terapeutas regresivos, quienes debatían la validez o ficción de los recuerdos preexistentes.
Debido a esto, surgieron organizaciones como la International Board for Regression Therapy, que comenzaron a realizar investigaciones para defender sus posturas.
En los años 80s, el psicólogo Roger Woolger contribuyó con conceptos teóricos que ayudarían a desarrollar mejores estrategias para la terapia regresiva.
1987 fue un año decisivo para la terapia de regresión, en el que se publicaron 4 importantes libros que abordaban innovadoras técnicas de hipnosis regresiva.
Entre sus principales exponentes estaban Ronal Wong Jue, Helen Wambach, Ernest Pecci, y Ian Stevenson, quien contribuyó con el trabajo regresivo en niños.
En el año 2010, el doctor Peter Mack, terapeuta de regresión, escribió 2 libros en donde narraba detalladamente las historias de duración de sus pacientes.
Actualmente, uno de los libros más reconocidos en el campo del método regresivo, es el del psiquiatra estadounidense Brian Weiss: “Muchas vidas, muchos maestros”.
Si te interesa ahondar más en las implicaciones éticas y científicas de la regresión de vidas pasadas, te recomendamos el paper científico del doctor Gabriel Andrade.
Cómo funciona la terapia regresiva
Debido a la polémica que ya mencionamos, no todos los terapeutas regresivos llevan a cabo lo que se denomina: hipnosis para la regresión de vidas pasadas.
Práctica que frecuentemente se relaciona con la charlatanería, los fenómenos paranormales, y el movimiento “new age” que cobró mucha fuerza en los años 80s y 90s.
Hoy en día, gran parte de los terapeutas regresivos, se enfocan únicamente en los conflictos inconscientes que tienen su origen en la niñez temprana del paciente.
Durante las sesiones, el terapeuta analiza las áreas de vida del cliente, y detecta los posibles conflictos no resueltos, para ayudarle a resolverlos mediante la hipnosis.
5 fases de la terapia de regresión
1. Relajación
Durante esta etapa también llamada fase de preparación, el usuario permanece con los ojos cerrados, y a diferencia de lo que se cree, está todo el tiempo consciente.
Su objetivo es lograr la completa relajación del usuario, para lo cual, el terapeuta se sirve de técnicas de respiración profunda, inducción y desensibilización guiada.
2. Técnicas de regresión
Una vez alcanzada la relajación profunda, el terapeuta irá guiando al usuario a través de preguntas y relatos que le permitan recordar su pasado con exactitud.
Mientras tanto, el paciente narra en voz alta, aquellos recuerdos que sea capaz de llevar a su conciencia, incluyendo sus temores, anhelos y demás sensaciones.
A lo largo del proceso, lo más común es que el terapeuta interrumpa, con la intención de indagar en los momentos más significativos de la experiencia.
3. Expresión emocional
En esta fase, el terapeuta cuestiona al paciente sobre sus emociones y sentimientos, con la finalidad de confrontar sucesos críticos y ayudarlo a desahogarse.
Esto se logra, mediante preguntas clave realizadas en los momentos cumbre de la narrativa del paciente, acerca de lo que sintió o percibió ante un cierto recuerdo.
Una vez que el cliente ha logrado desahogarse y liberar sus emociones, estas “se aíslan”, analizando su experiencia y las consecuencias que provocó en su vida.
4. Reaprendizaje
También conocida como reprogramación del subconsciente, en esta fase paciente y terapeuta trabajan juntos para encontrar nuevas soluciones o alternativas.
Al intentar descubrir el suceso que originó su conflicto, el paciente también suele recuperar información valiosa que puede ayudarle a enfrentar el problema.
Con ayuda del terapeuta, el paciente intentará resignificar su experiencia, trazando nuevas rutas de afrontamiento que le permitan desarrollar mejor sus fortalezas.
5. Consumación
En esta última fase, el terapeuta expone una breve reseña de lo ocurrido en consulta, invitando al paciente a compartir su propia opinión a manera de conclusión.
Luego de resaltar los avances más significativos del cliente, y antes de dar por finalizada la sesión, se resuelven dudas o inquietudes en caso de que existieran.
¿A quiénes puede ayudar la terapia de regresión?
Aún con la controversia que le rodea, la terapia regresiva ha logrado resultados exitosos en personas con características distintas y en diversos contextos sociales.
Especialmente, en aquellas personas que padecen traumas infantiles, o que no han logrado superar las secuelas emocionales de vivencias muy antiguas.
Una de las características más frecuentes del trauma psicológico, es que la persona que lo padece, no puede recordar con exactitud el evento que lo provocó.
Según los defensores de este método, esto se debe a que los eventos pasados tienen un impacto continuo y significativo sobre la capacidad de “sentir bienestar”.
Por lo que, al tomar consciencia de la experiencia que generó su trauma, las personas son capaces de sanar o paliar la herida que había permanecido abierta.
Lo que está comprobado es que la hipnosis clínica es de gran ayuda para superar la depresión, las adicciones, y diversas afectaciones emocionales e incluso físicas.
La terapia regresiva es efectiva cuando el terapeuta se apega al método científico, y resulta especialmente útil cuando se enfrentan situaciones como:
- Fobias inexplicables (de origen desconocido).
- Problemas para relacionarse con los demás.
- Dificultad para intimar con la pareja.
- Sentimientos de culpa y/o vergüenza.
- Malestar emocional sin causas reconocibles.
- Anhedonia (incapacidad de sentir placer).
- Pérdida o disminución de la motivación.
- Crisis existenciales o del sentido de vida.
Críticas y limitaciones de la terapia regresiva
Mucho se dice en el ámbito científico acerca de este tipo de terapia, y es que, como ya comentamos, la investigación científica que la respalda es limitada.
Por un lado, la investigación indica que la aplicación de la hipnosis regresiva en pacientes muy perturbados, puede hacer que se produzcan recuerdos falsos.
Se han encontrado casos de personas que referían recuerdos de abusos, enfermedades o accidentes, que con el paso del tiempo, se comprobó que eran falsos.
Debido a estas situaciones, se ha establecido como norma preventiva, que los terapeutas regresivos se abstengan de hacer sugerencias durante la regresión.
Con la finalidad de evitar que el usuario imagine situaciones que en realidad no le ocurrieron, sin embargo, tampoco hay evidencia de que esta medida funcione.
Por otro lado, en cuanto la regresión a vidas pasadas, se ha encontrado que quienes creen en la reencarnación se han beneficiado más de esta terapia.
Hoy en día, la comunidad de terapeutas regresivos sigue realizando investigaciones para seguir dándole la importancia que para ellos merece este método.