10 cosas que debes saber si tuviste un padre o madre alcohólico
“Mi padre fue alcohólico, pero eso a mí no me afecta en nada, yo soy exitoso, trabajador y además no bebo…”
– Ingeniero 39 años
No hablar, No confiar y No Sentir, son las promesas que a sí mismos se hicieron de manera inconsciente la mayoría de las personas que en terapia he atendido y que han sido hijos o hijas de padres alcohólicos. A que me refiero con esto, desde niños o adolescentes los hijos de alcohólicos deciden no hablar de lo que pasa en sus familias porque es vergonzoso y les duele. Y esto lo transfieren también en relación a miles de cosas que viven. No confían porque quienes debieron darles confianza no lo hicieron; también intentan no sentir como una manera de protegerse ante el dolor emocional.
Es muy común pensar que el alcoholismo del padre, de la madre o de ambos, no va a afectar a la persona si así lo decide. Nada más alejado de la realidad; todos los que han sido hijos de alcohólicos tienen personalidades muy definidas que les caracteriza el haber vivido en ambientes desorganizados como los que genera un padre o madre alcohólico. Veamos más a detalle diez cosas que debes tomar en cuenta si tuviste un padre o madre alcohólico; no quiero decir que forzosamente todas las tengas, solo leelas con calma e introspecciona.
Estos aspectos son tomados de la vasta experiencia de Claudia Black, especialista en el trabajo con alcohólicos e hijos adultos de padres alcohólicos.
HIJOS DE PADRES ALCOHÓLICOS
- El alcoholismo de tu padre o madre sí te afecta y ha afectado y afectará
Si no haces algo al respecto, no se trata solo de decir que ya perdonaste y entendiste. - Ser alcohólico o casarte con una persona que es o será alcohólica.
Es muy probable. - Saber que aprendiste muy rápido a no expresar lo que sientes.
Como una manera de evitar el dolor, pues cuando expresabas tu sentir eras ignorado. En casa con un padre alcohólico es común que todos los miembros hagan “como que no pasa nada”. - Ser hiper-responsables como una estrategia interna de equilibrio.
Y de equilibrar de manera inconsciente los actos irresponsables del padre o madre alcohólico. Ser muy exitosos es frecuente pues el perfil de hiper-responsable lleva a eso; pero el coste emocional y la tensión que hay dentro es muy alto. - Tener una tendencia muy marcada a ser el mediador.
Es decir siempre buscar arreglar los conflictos que aparezcan alrededor e incluso los demás buscar tus opiniones pues saben que esas opiniones son sabias. Llegar a convertirse a veces en el padre de su padre o en la madre de su madre. Subir jeráquicamente a un lugar que no corresponde y cargar con la familia. - Adaptar tu forma de ser a circunstancias incómodas o molestas.
Como reflejo de todas las veces que quisiste opinar o externar sentimientos y de nada sirvió para mejorar la situación con el padre o padres alcohólicos. - Aprender desde muy pequeño a callar tus pensamientos y emociones.
También puede ser que aprendiste a aguantar, es un rasgo masoquista, pues tu aguante te llevaba a sentir que colaborabas para que la familia siguiera unida. - Tener la misma adicción al alcohol, a otras sustancias.
Al trabajo, a la adrenalina o a relaciones toxicas con las personas cercanas. Es muy común que un hijo de alcohólico que no se vuelve alcohólico sea neurótico. - Tener claro que las familias son alcohólicas,
Cuando uno de sus miembros lo es, la situación se comparte aunque sólo uno beba. - Trabajar tus miedos, tus culpas, tu ira.
Y demás emociones, es imperioso y no hablo de las del pasado solamente, también las actuales.
No importa que ahora seas un adulto y que haya pasado mucho tiempo y que creas que ya has superado todo esto, o que has perdonado, usar el raciocinio no es superarlo, es solo eso racionalizar, el trabajo emocional es muy importante.
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Trabajar por tu salud emocional no tiene precio y está a la mano hacerlo, siempre encontrarás profesionales a tu paso y accesibles en costo, no dejes pasar de largo esta información.
