AUTOAYUDA


La autoayuda es un concepto amplio y controvertido, para algunos es un recurso capaz de revolucionar su vida, hay quienes la cuestionan, y otros la consideran un método paliativo.
Al final, “ayudarse a sí mismo” es una práctica deseable y necesaria. Mientras mejor cuidemos de nosotros más ocasiones tendremos de disfrutar una vida plena.
¿Qué es la autoayuda?
La autoayuda es el soporte que una persona se brinda a sí misma, para afrontar una situación difícil o cultivar una sensación de bienestar personal.
Se caracteriza por prescindir de la supervisión de terceros (psicólogos, médicos, o mentores), durante todo el proceso de mejora.
Su objetivo es adquirir recursos útiles y desarrollar habilidades aplicables a la vida diaria, principalmente en el área emocional.

Efectividad de la autoayuda
Como todo proyecto, influyen el método utilizado y el empeño que se le dedique. Un proceso de autoayuda eficaz consta de los siguientes elementos:
- Objetivo medible
 - Análisis del entorno y condiciones personales
 - Investigación y documentación
 - Verificación de las fuentes
 - Selección de recursos de autoayuda
 - Estudio de los recursos de autoayuda
 - Creación de un plan de acción
 - Puesta en marcha
 - Autoevaluación constante
 
La autoayuda resulta muy eficaz cunado se plantean objetivos medibles, y se utiliza para problemas que no requieren ayuda profesional.
Un proceso de autoayuda, es en si mismo un aprendizaje autodidacta basado en una experimentación de «ensayo y error» hasta lograr resultados.
¿Qué son los recursos de autoayuda?
Son muchos los recursos de autoayuda a los que podemos acceder: libros, audios, videos, cursos, conferencias, seminarios, entre otros.

Los recursos de autoayuda son imprescindibles en un proceso de mejora personal. Como consecuencia de su estudio podemos conseguir:
- Autoconocimiento
 - Gestión de emociones
 - Desarrollo de habilidades
 - Disfrutar una vida con mayor sentido
 - Depurar ideas negativas y recuperar perspectiva
 - Aumentar la confianza en uno mismo
 - Mejorar la autoestima
 - Conectar mejor con las demás personas
 - Sirven como vía de desahogo y consuelo emocional
 - Ayudan a resolver dificultades de forma práctica
 
Consideraciones Importantes
El concepto técnico de autoayuda, es muy distinto a la filosofía de marketing de los “happines sellers”, gurús y demás tipos de charlatanería.
Debido a esto es importante identificar sus contenidos. Te recomendamos encarecidamente evitar cualquier “fórmula de la felicidad”, “estrategia oculta”, o “método infalible”.
Un proceso de autoayuda serio requiere mucho autoanálisis y esfuerzo. No hay estrategias fáciles ni mágicas, quien te diga lo contrario está más interesado en tu compra, que en tu bienestar.
Por lo tanto, verifica bien tus fuentes y recurre a instituciones y autores cualificados, con buena reputación y experiencia profesional (de preferencia clínica).

Cuando la autoayuda no basta
Situaciones en las que la autoayuda no funciona: trastornos mentales, crisis emocionales, dilemas existenciales, adicciones, pérdidas no superadas, experiencias traumáticas, violencia física o psicológica y problemas legales.
Cualquier situación que comprometa la calidad de vida, incapacite o ponga en riesgo la integridad propia o de terceros requiere atención profesional.
No establezcas expectativas fuera de tu alcance, el mejor “termómetro” es tú estado anímico y las posibilidades que percibes en cuanto a la solución del problema.
Cómo dice el refrán: “No apuestes nada que no estés dispuesto a perder”. Si tienes inquietudes o no estás seguro de solicitar atención profesional, puedes realizar el siguiente Test: ¿Necesito un psicólogo?
Autoayuda y Desarrollo Personal
La autoayuda va de la mano con el desarrollo personal. Entendiendo como desarrollo personal el perfeccionamiento de cualidades y estrategias para ser mejor persona.
Esta fusión de autoayuda y desarrollo personal, implica un trabajo constante de autoevaluación, donde la persona se sumerja en su mundo interno, y por lo tanto mejore la percepción de sí misma y sus circunstancias.

Quienes decidan aventurarse en un proceso de autoayuda, deben establecer un fuerte compromiso con su desarrollo personal, ya que es un trabajo a realizar de forma responsable, y es la única manera de conseguir resultados.
Si emprender un proceso de autoayuda te resulta demasiado complejo o difícil, la estrategia probada para lograr un desarrollo personal es acudir a terapia.
Es cuestión de evaluar nuestros alcances y ser honesto con uno mismo. Al final, el objetivo de toda terapia es capacitar a la persona para valerse por sí misma, y lograr por cuenta propia aquello que más desea.









