Hablemos de enuresis ¿Cómo ayudar a mi hijo?
“Antes de querer cambiar al niño, tendríamos que querer cambiar nosotros.” Carl Jung
En el artículo anterior: “Mi hijo aún moja la cama ¿Cómo puedo ayudarlo?” hablamos a cerca de la enuresis y las posibles causas por las cuales se presenta, para esta breve entrada destacaremos la diferencia entre enuresis e incontinencia, para que podamos identificar con mayor claridad la situación por la que nuestros pequeños pueden estar pasando, además hablaremos de la enuresis en 1er y 2do grado.
La enuresis es uno de los problemas más comunes en los niños durante la edad preescolar y supone uno de los principales temas de atención psicológica; pues bien supone un síntoma y no un problema en sí.
Para tener mayor claridad en el tema vamos a recordar a que con enuresis nos referimos a: la emisión repentina de orina durante el día (enuresis diurna) o la noche en la cama (enuresis nocturna) o en los vestidos -sea voluntaria o intencionada- , en aquellos niños de edad cronológica entre los 5 años o el equivalente.
De acuerdo al nivel de control de cada niño podemos clasificar la enuresis en 2 tipos:
- Enuresis de 1er grado: cuando el niño no ha llegado a controlar nunca la micción.
- Enuresis de 2do grado: cuando ya existió control de la pipí y vuelve a aparecer posteriormente.
Ahora que tenemos claro que es la enuresis es importante definir a que nos referimos con incontinencia que no es más que la pérdida involuntaria de orina que condiciona un problema higiénico y/o social, y que se puede demostrar objetivamente. Como podemos darnos cuenta la diferencia entre enuresis e incontinencia es que la primera es voluntaria o intencionada, mientras que la segunda es involuntaria.
No está de más recordar que cuando un niño moja la cama de manera constante y acompañado de cambios de conducta inesperados (como los que mencionamos en el artículo anterior) es un indicador importante para buscar ayuda psicológica.
Hablemos de enuresis: Actividades prácticas
Si nos encontramos en el proceso de entrenamiento de la pipí podemos implementar actividades sencillas y efectivas para ayudar a nuestros hijos a disminuir la ansiedad y estrés que puede provocar, aunque debemos ser pacientes y recordar que todo se logra con perseverancia y ayuda:
- Actividad 1 – CALENDARIO: en un calendario debemos anotar o marcar con algo agradable a la vista del niño el día que amanezca seco, por ejemplo un sol, una floresita, caritas felices, etc.; por el contrario debemos colocar una imagen alusiva a que el niño mojo la cama, nubes grises, una gota de agua, etc., con el que identificaremos los días secos y húmedos, esto con la finalidad de el niño vea su progreso, podemos hacer que nuestro hijo decore el calendario para que sea más agradable a su vista.
- Actividad 2 – CAMBIAR LA ROPA MOJADA: deberán quitarse la ropa húmeda ponerse ropa limpia y cambiar las sábanas mojadas por unas secas (si el niño es capaz de hacerlo), y llevarlo todo al lugar de la ropa sucia. Ayudará a nuestros niños a adquirir responsabilidad y autonomía (hacerlos conscientes de sus propios actos).
- Actividad 3 – DESPERTAR E IR A HACER PIS: Hay que proponerle a nuestro hijo que vaya al baño antes de ir a la cama y si ya están recostados animarlos a que vayan, al igual cuando despierten con esto podrán conseguir despertarse por la noche siempre que tengan ganas, y que se dé cuenta de que la cama está mojada para acudir rápidamente al baño para terminar de hacer pis.
La clave de estos ejercicios es proponerlo como un juego divertido, como una meta y no como una obligación. Haremos que nuestros hijos se interesen y se estimulen para hacerlo. Si lo consiguen, ellos mismos verán los resultados, pues cuando se levante cada mañana la cama estará seca, lo cual le reportarán una gran satisfacción. Eso sí, no debemos olvidarnos de advertirles que si eso sucede es por todo el esfuerzo y trabajo que han realizado, para que nuestros hijos se den cuenta de que su avance no ha sido milagrosa, sino todo un esfuerzo de constancia.